miércoles, 26 de julio de 2006

DE LA MUERTE A LA HUERTA...NO SÉ CÓMO LLEGUÉ HASTA ALLÍ

A veces, cvando las alas caen, los árboles se conjuran para no dejarme pasar y la sangre se me congela en la comisura de los labios; me arrepiento del enorme alcance visionario que otorga mi condición. Me gustaría, cual mortal, ser capaz de poner una venda a mis ojos y, a veces, con ansia absurda, aprieto fuertemente los párpados para no vislumbrar la amarga realidad de este mundo, donde todo es mortaja. Intento escapar al miedo humano, pero se alza ante mí un ciprés que no me deja en paz. Puedo contemplarlo en cualquier parte: en las carreteras, en los ojos de los ancianos y en los pasillos de los hospitales. Después, como puedo, ahogo un grito desesperado y camino, como si pudiese, moviéndome de un lado a otro, escapar de Aquella a la que Temo. Más sé que por mucho que mis pasos sean raudos, su perseverencia para cazar es infalible. Tarde o temprano, el león se cobrará a la fatigada gacela; bien porque sus patas ya no son lo que eran, bien por un descuido. Ahora la contemplo, erguida frente a mí. El rostro cadavérico, la frente alta, impía y nauseabunda; riéndose de todos los que nos creemos imprescindibles para que el mundo siga.

-No eres nada, nunca nadie fue nada.-Me dice. Y su carcajada sarcástica rebota en el cuarto como si se rompiesen cien cristales.

Ayer leí a Galdós hasta el amanecer. Cuando el vampiro no tiene que llevarse a la boca, ha de alimentar su mente para no volverse loco. En un momento decía que la Muerte se lleva para sí a los mejores antes de tiempo y que sólo deja en la tierra a aquellos que no quiere a su lado. Cuando leí esto, recordé un cuento que escribí hace años de un tío que cree que la Muerte tiene algo personal contra él porque se lleva a aquellos que más quiere y decide vengarse, enviándole a los más indeseables que conoce mediante horripilantes crímenes. El caso es que al final, mi cuento era medio gore y los personajes repugantes  que odiaba el desgraciado protagonista, acababan en el mejor de los casos como un puzzle. Pensé en la edad que tenía cuando escribí esta historia. Sólo 16 años y ya estaba tarada. Mi profesor de literatura incluso la censuró. Cuando uno lleva la Tiniebla dentro, no es fácil librarse de ella.

Mi adolescencia fue un plato de mal gusto donde los momentos de estúpida euforia amorosa, se alternaban con aquellos instantes en que la Muerte era un todo. Y era entonces, cuando tenía que escribir o tirarme por la terraza. Muchas veces pensé en el suicidio de forma romántica (nadie que lo hace de verdad se recrea en ello) y, tras meditar las posibilidades, me quedaba con el cortarse las venas en la bañera. Se me antojaba hermosa y leve la sensación de ir perdiendo el peso del cuerpo, adormecerse en el agua cálida, fluir con ella, mientras se disipaba absolutamente todo. Años después, decidí que  tapar el tubo de escape del coche era lo mejor. Por alguna razón lo deben llamar "la muerte dulce".

Mis inclinaciones barrocas, me llevaron, pues, a imaginar y escribir sobre el suicidio una y mil veces, a indagar sobre aquellos que conocí una vez y que lo hicieron. Yo jamás lo hubiese hecho entonces y tampoco lo haría ahora. Primero, porque quiero vivir, pero, en segundo lugar, porque la Muerte me aterra sobremanera. Yo jamás pensé que fuera de cobardes. Más bien al contrario. Somos muñecos esperando a que el titiritero nos jubile y nos meta en una vieja caja. Ellos, los suicidas, son muñecos que dimiten y mandan a la mierda al titiritero. En ese sentido, los admiro. También hay gente que los tacha de egocéntricos porque no piensan en el dolor que le causarán a los suyos. Y yo digo: ¿Quién no es egocéntrico? El que quiere vivir, tiene montado un mundo de espectadores a su alrededor. Es el protagonista de su propia peli. Al suicida le importa tan poco su Yo, que no teme que la película se acabe. No le importa que nadie lo vuelva a ver, no se siente único para los demás ¿Es eso egocentrismo acaso?

No sé qué me ocurre en esta noche. Quizá sea el silencio que acaba de aparecer en mi cripta-hasta un instante bulliciosa-, quizá sea que hoy la veo mejor, quizá la culpa la tuvo el pobre Galdós y las dos películas malas que me tragué anoche, donde moría hasta el apuntador. Lo ignoro. Pero sé que un día voy a morir y que ese día será un ahora igual a ahora. Estoy sola pensando en que Alguien está jugando a Guillermo Tell con mi cabeza. Es inquietante. ¡Luego os extrañará que no duerma!

Y mientras tanto, cigarritos para el pecho, para que Guillermo se asegure el tiro en la oscuridad. Estoy gilipollas, no quiero dejar de fumar.

Voy a por una Cocacolalight, ahora vengo.

En vez de la Cocalight cogí un batido de chocolate, mucho más sustancioso. Si al fin y al cabo, todos acabaremos esqueléticos, ¿Para qué preocuparse por el peso?, jajaja. Una vez, de adolescente, iba con mi Tito-Favorito Fernando por la calle y pasó un tío con una calavera colgada del cuello. Yo le dije a Fer.

-Qué hortera, ¿cómo a alguien le puede gustar llevar eso?- Y él respondió:

-No lo taches de hortera que tú también llevas una- Desde ese momento, descubrí que el humor negro era el que más jodida gracia me hacía y es que supongo que es divertido reírse de lo que a uno le aterra. La Risa es fuerza y todo lo puede. Para mí, es de las pocas cosas que merecen la pena en este planeta. Si ahora la cascase y La Pálida Dama (como la llama Sabina), me dijese que me quedase con algo de la vida, escogería aquellos momentos en los que me dolía la boca de reírme. Hace un tiempo, pasé más de seiscientos días sin reírme y, de verdad, os aseguro que es como morir. Reíd pues, todo lo que podáis. Os lo dice un vampiro que lleva siglos viendo la miseria que se extiende sobre la Tierra. Todo: el Amor, la Salud y el Dinero, es arrastrado por la podredumbre del final. La risa es diferente y, si hacéis memoria, es lo único que queda. Nadie recuerda una época en la que estuvo sano, salvo que esté enfermo (con lo cual, está bastante jodido); cuando recordamos el amor pasado, ya no sentimos lo que sentíamos en ese momento. Son fotografías en sepia, más fiambres que la mortadela. Con recuerdo del sentimiento, pero sin sentimiento. Y ya no digo nada del dinero. Tan sólo recordamos alguna época donde fuimos poco más que indigentes (creo que todos tenemos alguna) y, encima, descubrimos la verdad que suena a tópico de que el dinero no da la felicidad, porque, resulta, que cuando no lo teníamos, éramos felices por cualquier cosa ¡No te digo nada por comer un filete!, jajaja.

Ahora bien: recordad un instante de risa. Si nada vuelve, la risa sí que lo hace. Es la única que sobrevive a la guillotina cruel del pasado. Volved en este instante a un lugar de vuestra vida donde una situación os hizo partir el pecho...Volved...

Volved...

Volved...

Volved...

Si me habéis hecho caso, ahora estaréis con una sonrisa en los labios, incluso riendo. La risa llama a la risa. ¿Quién no se ha puesto a reir solo en mitad del vagón de Metro por algo que recordó? El que sea un amargado, que tire la primera piedra.

Como no soy la alegría de la huerta, que supongo que es el tomate, ni tampoco un libro de autoayuda; paso de decir más gilipolleces por hoy. Espero que mi triste chiste hortícola os haya hecho reir y que, después de mi lúgubre comienzo sangriento, se haya abierto ante vosotros un mundo azul donde hayáis pasado un buen rato.

¡QUÉ BONITO! (ESTOY DE LA OLLA)

¿Aunque no debería ser estoy mal de la olla? Estoy de la olla=Soy de la olla -o sea, una zanahoria (siempre con la puta huerta) y, además, sintácticamente es una frase arcaica y mal construida ¿no sería estoy en la olla? Como no somos bobos y sabemos que lo de "olla" es en sentido figurado y que se refiere al Coco (otra cosa deforme para definir la cabeza), propongo a la RAE (Real Academia de la Lengua) que cambie el sintético y breve "Estoy de la olla" por "Estoy mal de la olla, uséase, la cabeza que Dios me dio". Si estáis de acuerdo, firmad a favor y lo llevamos.

Lo dejo o me pondré a desvariar cosa mala.

P.D.1. Citando a Sabina:

...a ti que me has ganado
con un naipe marcado la partida,
a ti que te has colado
en el coto privado de mi vida,
a ti que aún no sabes
los besos que te caben en la boca,
a ti que has comprendido
que a veces el olvido se equivoca,
a ti que has preferido
vivir como si nada fuera eterno,
a ti que has compartido
conmigo una almohada en el infierno,
a ti que has decidido no prestar atención
a frases del tipo "ese menda va a ser tu ruina",
a ti que has detenido con un beso el reloj,
a ti que me enfermas,
a ti que eres mi envenenada medicina,
a ti que vas deprisa
por miedo a que la risa se marchite,
a ti que te diviertes
jugando con la muerte al escondite,
a ti que has levantado
el árbol de tu nido en mi tejado,
a ti que has dirigido
la flecha de cupido a mi costado,

a ti que has decidido no prestar atención
a frases del tipo "ese menda va a ser tu ruina".
a ti que has detenido con un beso el reloj,
a ti que me enfermas,
a ti que eres mi envenenada medicina.

 Ya sabes que es A TI. BESITOS.


 


P.D.2. HOMENAJE AL ILUSTRE MANUEL V., QUE, COMO GENIO Y FIGURA QUE ES, LOGRÓ COMO UN CAMPEÓN, CON UNA NOTA QUE ASUSTA AL MIEDO, UNA CÓMODA PLAZA FIJA DE PROFESOR DE LENGUA Y LITERATURA. (Cuando sea mayor, quiero ser como tú, Compañero del Alma, Compañero) Ese mismo día, justo antes de que saliesen las notas estaba viendo un larguísimo documental sobre Bob Dylan y me dije "Si a Manolo le mola este tío, que es el puto amo, Manolo tiene en sus manos el secreto del éxito". Y tenía razón. ¡Felicidades! Un Superabrazo.


 


P.D.3. A Manuel S. por su apoyo y amistad constante. Un besazo.


 


P.D.4. A Pau, por el juego. Tú no sabes lo que es para un vampiro insomne tener algo tan rayante en lo que entretenerse. Gracias. Bss.


 


P.D.5. A Chavix, Toni, Pittín, José Luis, y todas las personas que se molestan en comentar mi blog. Muchas gracias. Bss.


 


P.D.6. A JC. Sé que no me quieres hablar y lo entiendo, pero quiero que sepas que te deseo lo mejor en tu nueva empresa.


 


P.D.7. A Mis Alumnos queridos. Desde mi tocamiento de narices, no os olvido, a ver si pasáis por aquí de vez en cuando y me echáis una firmita.


 


P.D.8. A Kike y a Víctor, aunque ninguno me haya llamado esta semana para ver qué tal mi oposición...Hombres, informáticos...¿qué se le va a hacer?


 


P.D.9. A Javi (Mortha) en especial y a todos los demás que esperáis un email respuesta. Soy una vaga, soy un desastre, pero soy buena, jajaja.


 


P.D.10. A mi Yaya Mamen que hoy me ha hecho arroz con tomate (uséase, con la alegría de la huerta), para que no me deshidrate. TQM.


 


 


 


 


 


 


 






 

 

6 comentarios:

  1. Fiel a mi mismo; aqui estoy de nuevo. Me gusta mucho como escribes, no pares y menos en verano que paso las horas muertas en mi oficina y asi me distaigo y paso un buen ratos. BS.

    ResponderEliminar
  2. Enhorabuena de todas maneras x el esfuerzo y por el resultado de la opo x  q si tu vida cambia a partir de aora para mejor pues creo q te valio de algo. Veo q ya me olvidast en tus P.D. stuve bastante liado con el curro y no pude conectarm casi como para leer tus fantasticas narraciones. No m olvido d ti. Un beso.

    ResponderEliminar
  3. ¿La alegría de la Huerta?...... no se si serás la alegría de la Huerta, lo que sí seguro que eres es la alegría de la Noche para muchos y del Día para otros, los cuales te leemos esperando tus relatos y tus "idas de olla", porque casi todo el mundo las tenemos y quien no... no sabe lo que se puede disfrutar con eso (a veces).
    Y no creo que la alegría de la Huerta sea el tomate, para mi más bien era la marihuana que tenía plantada un conocido en la huerta de su padre (en un rinconcillo)... ¡esa sí que es la alegría de la huerta!..... ja ja jaaaaaaaa

    ResponderEliminar
  4. Begoña:
     
    Por tí soy capaz de cazar un tiburón a chanclazos.
     
    Madrid - julio  de 2006

    ResponderEliminar
  5. Tu post de hoy ha sido como la noche que poco a poco se transforma en dia. Has empezado negra como la noche, para dejar paso a los primero rayos de luz que han ido subiendo la temperatura, para al final dejar paso al dia que ha subido la temperatura hasta algo mas agradable para los seres diurnos.
    Las locuras e idas de la olla son un gran aliciente en la vida cotidiana de muchas personas. Todos nos vamos alguna vez de vareta :P. Yo lo veo normal y bueno. Es una muy buena via de escape. Yo tambien las tengo, algunas veces pongo algunas comidas de bola en mi blog, pero no muchas, jaja. La capacidad de hacer reir a los demas es un don muy bonito, no todo el mundo es capaz de transmitir alegria. Incluso en los peores momentos de la vida hay que ser capaz de dejar salir esa sonrisa que tenemos oculta. A mi me has arrancado una, todavia ahora sonrio cuando lo pienso, jeje. Pero hacerme reir a mi es muy facil, jeje, soy una persona muy alegre, siempre ando riendo :P.
    Bueno, espero que este fin de semana sea mas tranquilito que el pasado ;). Disfrutalo y cuantanos la experiencia de un vampiro cuando los mortales osan invadir sus dominios.

    ResponderEliminar
  6. eres una crack!!....vampirilla, dedicate a escribir de verdad, me ha gustado mucho.

    ResponderEliminar